28 de junio de 2009

Experiencia Italiana

Como os conté hace tiempo no vivo exactamente en Milán sino que vivo en el "Mairena" de Milán, ahora con más razón porque a ambas las conecta el metro :p.
Pues leyendo el "Almontehoy" de aquí, o lo que es lo mismo, il Nuovasesto, he encontrado una perla de una chica Scout y os lo quería enseñar. Del mismo modo lo pongo aquí porque sé que a Ana le gustaría leerlo pero seguro que se me olvida, así que os dejo la tarea de enseñárselo :D.

Yo no sé hasta que punto ha llegado a España la noticia del terremoto del Abruzzo pero aquí en Italia ha sido bestial. Todo el país estaba movilizado y todo el mundo hablaba de lo mismo. Como todo en esta vida este tema se está enfriando y cada hablamos menos de ello.

El número de muertos de este desastre natural es parecido al del ataque terrorista del 11-M pero aquí hay una diferencia muy importante, los vivos están sin nada, no pueden retomar sus vidas con la pena de las muertes de sus familiares sino que tienen que luchar día a día por sobrevivir en medio de una jungla de gritos de rabia, llantos de pena, robos de desesperación y un millón de cosas más.

Esta chica se va de voluntaria y cuando vuelve nos cuenta su experiencia y me parece importantisima la frase de los propios habitantes "Los aquilanos somos fuertes pero necesitaremos de vuestra ayuda mucho tiempo", tomaros unos segundos y leer esto que no es tan largo como parece.

Os dejo el articulo en italiano y os traduzco una parte grande que todo es mucho y puede que algunas de las cosas no las sepa traducir bien.


Glis scout di Sesto messaggeri dell'Abruzzo: "Non dimentichiamo il sisma e gli aquilani"
Chiara Ginocchio

Sono partita il 29 maggio con 4 sconosciuti. Il viaggio è durato sette ore, di cui forse solo dieci minuti di silezio. Prima di partire non avevo provato a pensare cosa mi aspetasse. Sapeco che la situazione era inimmaginabile. Il campo de Centi Colella è a 4 Km. da L'Aquila. Noi dovevamo gestire il bar e la distribuzione del vestiario. Quest'ultimo era un compito delicato poiché doveva tenere conto delle esigenze di tutti senza provocare invidie.

Le direttive erano poche: non consegnare merce usata, servire solo gli sfollati della nostra tendopoli e soddisfare qualsiasi richiesta ci venisse fatta se solo ve ne fosse disponobilità in magazzino.

La grande tensione portava le persone, non tutte a dire il vero e neanche la gran parte, a incolparsi fra loro di rubarsi le cose e ad accusare noi scout e colutari di centellinarle. Così dopo ore passate in magazzino a cercare la taglia dei pantaloni o delle pantofole migliori, e aver trovato tutto ciò che una persona chiedeva, tranne un asciugamano grande per la doccia, sentirsi attacare era un duro colpo, ma mentre tronavo soconfortata al magazzino incontravo sempre qualcuno che riusciva a restituirmi il sorriso.

La tendopoli è una realtà parallela. La giornata è scandita solo dai pasti. Anche il tempo atmosferico è mutato, dicono. Si alternano pioggia e sole, caldo e freddo, vento e calma. Nulla è prevedibile ed è questa la sensazione degli aquilani. Oggi sanno solo che vivono in una tenda, che fanno la fila per mangiare e prendere il caffè, per andare in bagno e per avere vestiti, shampoo, carta igienica o fazzoletti. Sanno che se in piena notte gli scappa la pipì devono uscire al freddo per andare in bagno. Non sanno, di contro, se la loro casa sarà interamente ripagate, ma sanno che non la riavranno com'era e come l'amavano. Non sanno nemmeno quando qualcosa gli verrà ridato. Nei loro occhi c'è diffidenza, sconforto e paura, fortunatamente in qualcuno anche coraggio.

Ho chiesto cosa riferire, a chi non l'ha vissuto, quello che può succedere in 22 secondi. Mi è stato risposto di dire che gli aquilano sono forti e non si sono mai sentiti soli. Chiedono solo di non essere dimenticati perchè avranno bisogno di noi per molto tempo.

La città sembre surreale. Ci sono case completamente aperte, in alcune si vede il salotto con la luce ancora accesa; molte sono spostate rispetto ai loro pali portanti; delle maccine si intravede solo la traga; una casa, caduta di piano, pende cerso destra, sembre appoggiata in quel modo apposta, sembre un plastico.

Sono ripartita in 7 giugno con le stesse 4 persone, ormai mi sembrava di conoscerle da sempre, eooure in sette ore di viaggio i silenzi sono stati più lunghi. Ognuno aveva il cuore in sibbuglio e la mente impegnata nel ricordo delle persone che stava lasciando.

Sono invidiosa dei volontari che sono ancora là. Vivere qui mi è difficile, perchè sento di non poter puì sprecare nulla, nemmeno un minuto, ma allo stesso tempo so già che lo farò, tornerò alla routina e perderò di vista le cose importanti, per il solo fatto che molte persone vivono in questo modo.
*Gruppo scout dei Sesto S.G.


Traduccion sin florituras:

Salí el 29 de mayo con 4 desconocidos. El viaje durò 7 horas, de las que quizá hubo 10 minutos de sliencio. Antes de salir no había pensado en lo que me esperaba. Sabía que la situación era inimaginable. Ibamos al campo de "Cento Colella a 4 km del Áquila. Teniamos que gestionar el reparto de comida y la distribución de ropa. Esto último era un tema delicado porque tenía que tener en cuenta las exigencias de todos sin provocar envidias...

... había bastante tensión y algunos, aunque es cierto que una minoría, se culpaban y robaban entre ellos. Imagina tener que buscar de todo para una persona y aun así ser culpado de no hacer las cosas bien pero siempre había alguien detrás para arrancarte de nuevo una sonrisa.

Hasta el clima ha mutato, dicen. Se alternan por igual sol y lluvia, frio y calor, viento y calma. Nada es predecible...

...Todos saben que viven en tiendas. Todos saben que tienen que hacer cola para comer, tomarse un café, ir al baño, para que te den papel higienico o pañolitos...

... Por el contrario no sabén si su casa se la pagarán al completo, pero sabén que no la volverán a tener como era y como la amaban. En sus ojos puedes ver desconfianze, incomodidad y miedo, afortunadamente, en alguno también puedes ver coraje....

... Piden solo no ser olvidados porqué nos necesitarán mucho tiempo.
La ciudad parece surrealista. En algunas se puede ver la luz del salón aun encendida...

... He vuelto el 7 de junio con las mismas 4 personas, ahora parecía que las conocía de siempre (giño al camino), y en estás nuevas 7 horas de viaje los silencios han sido más largos. Cada uno tenía el corazón agitado y la cabeza ocupada con el recurdo de las personas que estava dejando atrás (en italiano es mucho más profunda esta frase porque subbuglio y impegnato tienen más de un significado y todos valen para este caso).

Envidio a los voluntarios que todavía están allí. Vivir aquí se me hace difícil, porque siento no poder ayudar de ninguna forma, pero del mismo modo ya sé que haré, volveré a la rutina y perderé de vista las cosas importantes, por el solo hecho de que muchas personas... viven de este modo.>

No hay comentarios: